El lavado en seco es una técnica de limpieza que utiliza solventes, en lugar de agua, para eliminar manchas y suciedad de la ropa. Esta técnica es especialmente útil para prendas delicadas que no pueden ser lavadas en agua, como trajes, abrigos, vestidos de seda, entre otros.
El proceso de lavado en seco implica el uso de una máquina especializada, que hace girar la ropa en un tambor sellado mientras se rocía un solvente de limpieza. La mayoría de los solventes utilizados para el lavado en seco son químicos, como el perchloroetileno y el hidrocarburo. Estos solventes no penetran las fibras de la ropa, en cambio, disuelven la grasa, la suciedad y las manchas en la superficie del tejido. Después de la limpieza, la ropa se seca en una máquina de secado especializada, donde se elimina cualquier residuo de solvente y se suaviza la ropa con un proceso de vaporización.
El lavado en seco ofrece muchas ventajas en comparación con el lavado tradicional. Por ejemplo:
Cada prenda de ropa está diseñada con una combinación específica de fibras, colores y estilos. Algunas prendas son más resistentes que otras y se pueden lavar en agua sin problema. Sin embargo, hay algunas prendas que necesitan un tratamiento especial de lavado, como el lavado en seco.
La lana es un material delicado que puede encogerse, deformarse o perder forma si se expone a temperaturas elevadas o se lava con detergente en agua. Para evitar estos problemas, es recomendable lavar las prendas de lana en seco. El lavado en seco es mucho más suave y no comprometerá la integridad de las fibras. Las prendas de lana incluyen abrigos, suéteres, bufandas y faldas.
La seda es un material suave y lujoso que se encuentra comúnmente en vestidos, blusas, camisas y corbatas. La seda es muy delicada y puede ser dañada fácilmente por el agua o por el frotamiento. Además, la seda puede decolorarse, perder brillo o arrugarse después de ser lavada. Para mantener la calidad de estas prendas, es recomendable lavarlas en seco.
El terciopelo es un material que tiene una superficie suave y aterciopelada que se consigue a través de la aplicación de fibras extra largas y tupidas. Debido a su textura, el terciopelo es muy susceptible a las manchas y a los brillos a causa del agua. Además, después de lavar en agua, el terciopelo puede perder su suavidad y cruzarse. Para evitar estos problemas, es mejor lavar las prendas de terciopelo en seco.
El cuero y el ante son materiales que no deben ser lavados en agua, ya que el agua puede hacer que se deformen, pierdan color o se vuelvan rígidos. En lugar de eso, es recomendable limpiar estas prendas en seco. La limpieza en seco es suave con el cuero y el ante, lo que significa que las prendas durarán más tiempo y se verán tan bien como nuevas durante más tiempo.
El lavado en seco es una técnica de limpieza que puede resultar muy efectiva para algunas prendas de ropa, especialmente para las prendas delicadas que no pueden ser lavadas en agua. La técnica consiste en utilizar solventes para disolver la suciedad y las manchas de la superficie del tejido sin comprometer la integridad de las fibras. Prendas como la lana, la seda, el terciopelo, el cuero y el ante pueden beneficiarse enormemente de este tipo de limpieza. Si bien la técnica de lavado en seco puede ser más costosa que el lavado en agua, el resultado compensa con mucho el gasto adicional.